El Camino Salta - Buenos Aires tiene un poco mas de 1400 km. y como me encontraba solo, la ocasión era buena para pensar y dejar volar las ideas.....
El viaje lo hice en dos días, parando a dormir en Ceres, y el Principito se portó a las mil maravillas. Al igual que los caballos de alquiler, y por ir descendiendo al nivel del mar, a medida que se descontaban kilómetros, la aguja llegaba mas alto en el velocímetro... Quería llegar a casa y descansar!!! Yo??? También. La aventura había sido suficiente y siempre hay que guardarse algo en el tintero para poder seguir escribiendo...
No tengo muy claro que fue lo que me pasó y porque tardé tanto en darle un fin a este blog. Había, y hay una pregunta dentro mío a la cual me cuesta encontrarle respuesta y fue un comentario constante hacia cualquier persona que me preguntara por el viaje. Yo les contaba, y aun sostengo, que una cosa muy llamativa de este viaje era que todos los integrantes eramos una ensalada de diferentes historias y personalidades. A modo de ejemplo Guillermo, piloto de combate naval y veterano de la guerra de Malvinas, convivía con Willy, motoquero de alma y mezcla de Pappo (sin pelo) con Platón. O también, porque no mencionar, las diferencias entre la "precisión" alemana y el "lo atamos con alambre" criollo.
Mi pregunta era ¿ cómo es que de todo esto, salió algo tan maravilloso? Charlando en la cena de hoy - ayer - con José me di cuenta que ese nexo o denominador común a todos no estaba adentro nuestro. Creo que no existe una característica, gusto o historia que no una a todos. Ni siquiera la pasión por los Citroen estaba presente en todos los integrantes. La conexión que surgió en el grupo, le decía a José, hay que buscarla por afuera de las personas; y si bien ambos sabíamos a que nos referíamos, tratabamos de encontrar un momento y/o palabras para explicarlo. No pudimos....
Analizando otras facetas del viaje, también me doy cuenta, que a todos nos embargó un sentimiento de solidaridad y pertenencia hacia todos esas personas, pueblos y culturas con que nos cruzamos, aunque las diferencias en lo que podría ser nuestra cotidianidad son abismales.
¿Por qué pasan estas cosas? porque uno esta de vacaciones.... No creo!!! Me he peleado con algún amigo, con muchas cosas en común, en alguna de ellas. ¿La actitud con que uno encaró esto? puede ser.... pero ¿cúal es?. Creo (no lo se) que por las características del viaje, todos fuimos con un espíritu de apertura hacia lo diferente. (Al menos yo seguro). Esto nos permitió conocer el corazón de las personas, y no cegarnos ante las diferencias con el uno propio.
También ese deseo de conexión con la naturaleza, debe haber influido para que nos encontremos.... No se.... sigo sin muchas respuestas.
En este punto debo aclarar que todos los integrantes del Tour Andino prometieron poner sus reflexiones y opiniones en la parte de comentarios. (Sepan que aquel que no cumpla será expuesto con fotos comprometedoras que tengo en mi poder..jaja....No, mentira. Yo no uso los medio, esto no es Clarín...).
En este momento y desde el recuerdo, es decir "volviéndolo a pasar por el corazón", ( Re= volver - Cordis= Corazón ) no puedo dejar de dar la gracias a Dios por haber conocido a esa manga de locos lindos del Tour Andino, que sin pensarlo demasiado, un día, y no muy lejano a la fecha de salida, se sumaron y dijeron vamos!!! Creo que cada uno de ellos tendría que tener unos cuantos párrafos para que aquellos que nos los conocen, o mejor aun, creen conocerlos desde la cotidianidad y lo laboral, sepan de la calidad humana de la cual están hechos. Lo que no creo es que yo, encuentre las palabras exactas para ponerlos en su total dimensión.... por eso no lo voy a hacer, pero valga esta aclaración.
A quienes siguieron el blog les doy las gracias por acompañarnos.
El "Principito" se despide, no sin antes decir que "lo esencial es invisible a los ojos"
Y como dice mi amigo Willy:- Un abrazo interminable a todos!!
(Willy.... cumplí!!!)
Cuando comencé a pensar en hacer el Tour Andino, lo proyecté para recorrer las inmensidades, colores, historia y sabores de los Andes del Sur, para qué, así, como el magnífico Cóndor sobrevuela la cordillera lentamente y dejándose llevar por las corrientes cálidas ascendentes, el 3cv también a su plena potencia trepara lentamente los caminos que tuviéramos juntos que encarar.
ResponderEliminarAsí bajo estas premisas fue como comenzaron a sumarse uno a uno los integrantes del TOUR. Algunos entusiasmados por recorrer nuevos caminos, otros por la aventura y excitación que les despertaba el desafío o tal vez por vivir una experiencia que nos pondría a prueba más allá de nuestros límites.
Lo cierto es que, inesperadamente y sin buscarlo el Tour Andino se completó con una variedad polifacética de personalidades. Con distintas experiencias previas, con distintas expectativas y con diversos talentos se conformó un crisol de vivencias y un ámbito de expresión y un espacio de libertad increíble.
Desde mi posición de mentor y siendo conciente a los desafíos a los que nos someteríamos, creo que, lo convocante y común a todos los integrantes fue la búsqueda personal de lograr un espacio compartido, un espacio donde manifestarnos libremente y ser aceptado sin prejuicios. Un espacio personal, pero compartido en un contacto pleno con la naturaleza.
Creo que finalmente las premisas se cumplieron y muchas son las anécdotas e historias por contar. En la memoria de todos queda el recuerdo vivo de los momentos compartidos y de haber descubierto lo mejor que cada uno puso en juego para llevar a cabo esta experiencia tan particular a la que yo llamo "Experiencia 3cv".
Gracias por la magia de todos.
José (01-06-11)