viernes, 8 de abril de 2011

Uyuni - Potosi

El despertar en el hostal de Uyuni nos auguraba un despertar cargado de emociones. ( lo que no sabíamos era que iban a ser tantas).
Retrocedimos los últimos 20 km. del día anterior para buscar la entrada al salar. En un momento nos desviamos y terminamos a campo traviesa en el aeropuerto en construcción. La llegada al salar fue como la habíamos soñado. Botella de champagne para festejar la ocasión, fotos y filmaciones de rigor e intercambio de opiniones con turistas de todo el mundo. Si bien la cosa era complicada para la circulación de las citronaves por el salar, le hicimos mojar un poco los pies a nuestros queridos autos. Nosotros también lo hicimos. La verdad que se vivía en todo el equipo una gran emoción por estar ahí!!! vimos las construcciones de los hoteles de sal y retornamos al pueblo a buscar las cosas. Antes de salir hicimos lavar y rociar con aceite todo el chasis de los autos para cuidarlos. Mientras tanto las motos estaba en camino a Potosi, por un camino que no nos lo habían referido como tan complicado. Polo, Willy y Pipi en un momento se perdieron porque erraron la huella y terminaron cruzando un gran médano , en donde Pipi se pegó una caída sin mayores complicaciones. Los autos salieron mas tarde, en la primera gran trepada requirieron la asistencia de la "linga" para su remolque, ya que salvo a "azucena" al resto le faltaba fuerza. ( casi 4000msm y nafta de mala calidad). La experiencia fue fuerte. Mas de mil metros de remolque en camino de montaña con curvas cerradísimas. Primero fue Mafalda y luego yo con el Principito. En una curva el auto quedó desacomodado con respecto a la camioneta y se sintió el simbronazo que me acomodó todos los huesos.
La noche y la lluvia se nos vino encina y el Principito agudizo aun mas la falla. Consecuencia: en el medio de la montaña,bajo la lluvia y con la asistencia de una linterna terminamos desarmando el carburador, que estaba lleno de barro y limpiando los "Chiclé". (tuerquitas por donde se regula el paso de nafta y aire) Mi desesperación fue total cuando se me cayó en el motor y casi pierdo uno de estos. Recuperado, armado y vuelta a la ruta el auto volvió a su condición original de potencia. Es aquí donde debo resaltar el temple, la voluntad inquebrantable y el apoyo permanente de Carlos y el Chino. Sin ellos a bordo de la Toyota la cosa hubiera sido extremadamente difícil. También hay que decir que por la personalidad de ambos, las cosas son mucho mas fáciles y uno se siente muy seguro en su compañía. El recorrido fue duro, Guillermo para no perder la costumbre ofició de torre de control avisando de los camiones que se nos venían. Cerca de las doce de la noche llegamos a Potosí, comimos lo que había de víveres y nos fuimos a dormir exhaustos.
El tiempo es escaso y tratare de subir hoy a la noche mas vídeos y fotos. Estamos todos bien y les mandamos un interminable abrazo a todos.

1 comentario:

  1. Hola a todos!! los felicito por lo realizado hasta ahora realmente tanto las fotos como los videos son una muestra de lo bien que lo estan pasando (a pesar de algunos muy pocos... obstaculos) Estan a punto de coronarse un esfuerzo mas ¡¡VAMOS!! cuando lleguen descorchamos aca.
    Gran abrazo a los hermanos Franzosi y del mismo modo al resto del equipo.

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